10 octubre 2007

El Miedo

Llevo al miedo a mis espaldas, lo noto, lo siento respirar tras de mi, no me deja ni a sol ni a sombra, siempre presente en cada paso que doy.
Sé que el miedo se alimenta de mis migajas, yo soy el que lo ceba día tras día y de mi depende que no crezca y se haga más poderoso.
No es que mi miedo sea peor que el de los demás, pero es el mio y me afecta más. Algunos dicen no tener miedo, no les creo, van de valientes, pero no les creo.
Mi miedo es un compañero fiel, jamás me engaña para irse con otro, siempre ahí, a mi espalda, oscuro y amenazante.
Si, ya sé que casi nunca pasa nada de lo que temo, pero mi miedo es muy bueno, nunca falla, siempre me recuerda que algo puede no ir bien, que algo puedo perder, que algo puedo no lograr.
Mi miedo es traicionero, me empuja cuando me tambaleo, me acosa cuando estoy caído, me pisa el cuello cuando estoy sin resuello.
Pero mi miedo también sabe que a mi me gusta bailar con él, sé que siempre estará ahí, recordándome que no soy lo suficientemente bueno o que puedo no ser aceptado o yo que sé que mil maldades y castigos del infierno.
Pero a mi me gusta bailar con él, lo cojo del brazo, le agarro la cintura y me pongo a dar vueltas como un loco, hasta que exhausto y mareado deja de importunarme.
Y como sabe que me gusta, procura no dejarse enganchar, pero yo lo conozco, sé que se acercará demasiado, porque es un sádico que disfruta con mis angustias.
Y es entonces, cuando le cojo bien fuerte, acompaño sus pasos, me acerco a él y mirándole a los ojos le doy un beso de tornillo que me hace por un rato disfrutar de su inevitable compañía.
Y luego me rio, me descojono en su cara, él se enfada, se oculta humillado. Aunque sé que volverá, pero para entonces tendré preparado algún otro paso de baile con el que sorprenderle e incluso esperar su cortejo.

2 comentarios:

benito_reyes_vega dijo...

Existencialista le leo en varios post. Introspectivo también. Así como ... de reencuentro con su mismo usted... Aceptando.

Buen ejercicio me parece el de la 'vigilia' constante... El de la atención. Sí, buen ejercicio.

Por cierto. Es verdad. Se es buen conversador porque se escucha bien. O al menos asi mismo lo pienso yo también.

Saludo... Y continuidad en la tarea que más dura. Uno mismo.

Anónimo dijo...

Me alegra oír de nuevo de tí, aunque sea de tus miedos...Yo suelo pensar que esto es un teatrillo, y que, a veces, me olvido de que yo escribo el guión y dirijo a los artistas, a fin de cuentas, Ésta es mi película. Bienvenido artista Pako, a ver si hacemos un capítulo pronto.