27 noviembre 2006

Es caprichoso el azar

¡Que curiosa es la vida! Hace una semana, solo existía ella, no podía dejar de pensar en ella, de sufrir por ella. Hace 4 dias ella ya no existia en mi vida, solo en mi cabeza, y se iba diluyendo, como un terrón de azucar en una cuchara de agua, poco a poco pero inexorablemente. Con esperanzas (pequeñas) pero para siempre.
Hace 3 días, aparece de repente y llena de nuevo todo... por un momento. Hoy es importante, muy importante, pero ya ni de lejos es todo. ¿Como se pueden mudar los sentimientos y las relaciones tan deprisa en tan poco tiempo?
No dejo de temer que pueda pasar, aún es pronto, pero reconozco que estoy feliz, que estaba ya feliz antes de siquiera volverla a ver. Menuda eternidad ¡4 días sin verla! Y despues de verla ¡nada! Sigo feliz.
El viernes se produjeron dos hechos, si no milagrosos, si al menos asombrosos. El primero, fue solo un recuerdo ¡que poderosa es la mente! Nunca dejaré de agradecer lo que Juan Planes y José Pedro García me han enseñado. Aunque solo sea a base de insistir, creo que ahora no lo olvidaré nunca. ¿El segundo fue una casualidad? La suerte no existe, o eso creo, sabía que estaría allí. Y allí estaba, luego todo fluyó...

Es caprichoso el azar
Fue sin querer,
es caprichoso el azar,
no te busqué
ni me viniste a buscar.
Tú estabas donde
no tenías que estar,
y yo pasé,
pasé sin querer pasar.
Y me viste y te vi
entre la gente que
iba y venía con
prisa en la tarde que
anunciaba chaparrón.
Tanto tiempo esperándote.
Fue sin querer,
es caprichoso el azar,
no te busqué
ni me viniste a buscar.
Yo estaba donde
no tenía que estar
y pasaste tú,
como sin querer pasar.
Pero prendió el azar
semáforos carmín,
detuvo el autobús
y el aguacero hasta
que me miraste tú.
Tanto tiempo esperándote.
Fue sin querer,
es caprichoso el azar,
no te busqué,
ni me viniste a buscar...
Mi idolatrado JM Serrat

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